20 de septiembre de 2009

Estás.

Estás
incluso cuando me faltas
retumbándome
palpitas en mis palmas
abrasándome en cada caricia

trenzadas mis piernas
ahorcándote.
hasta aquí arrastro las cadenas
sin saber cuándo
aprendí a besar.

No puedo moverme
apuntándome el arma
humillada, no
fusilada
que entre tú y yo
no hay nada.
Nada más hay
que el roce.
Que tras de ti
no hay nada.
Nada más hay
que tu silueta clavada
en mi nostálgica retina
queriéndote devorar.

Así me faltas.
Así te amo.