Yo, que sé guardar secretos
me he convertido en el tuyo.
Encajonada entre tus esquinas,
asfixiada en tus recodos
relamo las sobras de tu plato
exprimo tus rincones.
Redecoro tus frases
y te rebaño, líquido
sobre mi piel.
Abdomen menguante
y flotante
cubriendo mi cama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario