15 de julio de 2008

Papá.




y que no hay nada más
mi princesa
que donde acabas tú
quizás empiece yo
para ser siempre
los dos. 

y que no hay nada más
mi princesa
donde muere tu miedo
nace mi abrazo
para sujetarte fuerte
muy, muy fuerte
a tu vida.

A ti.

Mi primera palabra.
Mi primer pérdida.
Mi primer recuerdo.


2 comentarios:

Jenn Díaz dijo...

El final es realmente precioso.

àrid absurdalah dijo...

conmueves.


tengo ganas de verte limón